La escritora, Conchi Collado Lobato, presentó el pasado viernes en el Salón de Actos del Palacio de los Gobernadores su libro “Juego de Ajedrez”, de la editorial Círculo Rojo. Collado estuvo acompañada por la tte de alcalde de Cultura, Dolores Marchena, y la escritora y periodista, Nuria Ruiz.

Conchi Collado Lobato nació en San Martín del Tesorillo (Cádiz) en 1.956 y vive actualmente en La Línea de la Concepción. Durante más de veinticinco años trabajó su propio negocio donde la relación con el público le aportó el conocimiento de muchas historias y le enriqueció con una larga experiencia que ella ha plasmado en esta primera novela. Ha pasado de oírlas a escribirlas.

Participa en Clubes de Lectura de San Roque y La Línea y con “Juego de Ajedrez” inicia su andadura literaria. Ha escrito relatos cortos, sainetes, cuentos, poesías y además monólogos para el “Grupo de Teatro Malayerba” al que pertenece.

La tte. alcalce, Dolores Marchena, abrió el acto agradeciendo a la escritora haber elegido San Roque para presentar su ópera prima y a los asistentes por acompañarla esa noche. La escritora Nuria Ruiz,  que en esta ocasión fue a título  personal y por amistad y no, como delegada de la Unión Nacional de Escritores, presentó el libro con una reseña donde calificó la obra, entre otras cosas, de amor con mayúsculas, una novela donde se da cabida a distintos tipos de amor: el romántico, el del deseo, el platónico, el maternal…así como a los distintos sentimientos que ello conlleva: los celos, las envidias, las mentiras…

Su amiga, Elisabeth Alsi, compañera en el grupo de teatro leyó uno de los párrafos más significativos de la obra. Estefanía Lobato Collado, hija de la escritora que no pudo asistir al acto, mandó un emotivo escrito dirigido a su madre que leyó Nuria Ruiz ya que ella no pudo acudir al acto.

En definitiva, una tarde repleta de sentimientos y emociones en la presentación de este JUEGO DE AJEDREZ de Concha Collado.

“Juego de Ajedrez” es una novela de 232 páginas en la que Marlén, mujer madura, generosa y educada, decide ayudar a la esposa de su sobrino que tiene un hijo invidente.

Ella, con sus relaciones y su buena posición, busca soluciones de todo tipo para aliviar el problema del pequeño en la medida de lo posible.

Para ella es como su primer nieto. Al gran afecto que Marlén siente por su hijo, la madre del pequeño, mujer joven y ambiciosa, le corresponde acaparando a su marido con sibilinas artimañas.

Cuando Marlén se ve en ese callejón sin salida acude a Vladimir, amigo de la juventud, quien le corresponde de forma inesperada, llegando a producirse un resultado de lo más imprevisto.»